Los ácidos grasos se encuentran en muchos de los alimentos que consumimos día a día; por lo que el proceso de digestión suele ser muy estudiado por los expertos, ya que a partir de allí, se obtienen todos los beneficios de los ácidos grasos.
Sin embargo, algo que también es motivo de estudio, y que forma parte del proceso, son las formas de almacenar los ácidos grasos en el organismo. Siendo esto importante conocerlo para mantenerse informado acerca de los procesos que se llevan a cabo en su metabolismo.
Metabolismo: Formas de almacenar los ácidos grasos
Al momento de consumir cualquier alimento que contenga ácidos grasos, comienza el proceso de metabolismo, el cual empieza básicamente con la degradación y la síntesis del mismo. Sin embargo un proceso muy importante son las formas de almacenar los ácidos grasos; ya que gracias a este almacenamiento, el cuerpo cuenta con depósitos de energía.
Almacenamiento de los ácidos grasos en tejidos adiposos
Los tejidos adiposos son también llamados tejidos grasos, y cumplen con la funcionalidad de almacenar lípidos en su citoplasma; los cuales se conocen por el nombre de adipocitos.
Los ácidos grasos se almacenan en los tejidos adiposos mayormente en forma de triglicéridos. Cabe destacar que esto lo hacen después de atravesar por un largo proceso de metabolismo.
Normalmente este tejido cumple con muchas funciones en el cuerpo, y una de las más importantes es la generación de grasas para el organismo y servir como una especie de protector de algunos de los órganos. Además, son esenciales para resguardar la energía en el organismo y administrarla; para usarla en caso de «emergencia», como energía.
Almacenamiento en forma anhidra
Cuando hablamos del almacenamiento de los ácidos grasos en forma de triglicéridos, podemos referirnos a que estos se almacenan de forma anhidra. Es decir, que no contiene ningún tipo de agua; por lo que al momento de su oxidación el rendimiento de energía que posee se incrementa.
Almacenamiento de carácter apolar
Esto se da mayormente en los casos de carbohidratos. En donde 1 gramo de glucógeno retiene un aproximado de 2 gramos de agua.
Almacenamiento de ácidos grasos y reserva de energía
Las formas de almacenar los ácidos grasos están directamente relacionadas con la reserva que se tiene de energía. Cuando ocurre el proceso de metabolismo de los ácidos grasos, se suele almacenar una parte de ellos en los tejidos adiposos; a fin de mantener unas reservas de energía en caso de que el organismo las requiera posteriormente. Estos los absorbemos de los diferentes alimentos que consumimos.
Además, esto suele brindarle la energía que requiere el cuerpo para realizar sus actividades diarias. Y en caso de que no se consuman ácidos grasos en un periodo de tiempo, el organismo comenzará a utilizar sus reservas de energía, almacenadas en los tejidos adiposos.
Normalmente los ácidos grasos se suelen almacenar en forma de triglicéridos, aunque también se almacenan como glucosa o glucógeno. En este último caso, el organismo tendría energía suficiente para funcionar durante un aproximado de 24 horas. Mientras que con el almacenamiento de los triglicéridos, el cuerpo humano podría tener reservas de energía hasta por varias semanas.
Una vez que los ácidos grasos son almacenados, bien sea como lípidos, triglicéridos, glucosa, entre otros; serán transportados de acuerdo a las necesidades que se tengan. Es decir, que a los órganos que necesiten energía se transportarán las diversas reservas que se tengan.
Sin lugar a dudas, todo el proceso del metabolismo y las formas de almacenar los ácidos grasos son esenciales para el funcionamiento del organismo; ya que juegan un papel fundamental en el desempeño de todas las funciones orgánicas, las cuales requieren de energía para poder funcionar correctamente.